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Descendientes directos de la exitosa gama SAME Frutteto, los nuevos Frutteto Natural Fase III B son modelos que ofrecen una eficiencia y una fiabilidad máximas. La nueva distribución del puesto de conducción y la capacidad de elevación trasera son algunas de las características destacables de esta gama. Además, ofrece amplias posibilidades de configuración con motores de 3 y 4 cilindros.
Todos los motores, de 3 cilindros (en los modelos 70 y 80) y de 4 cilindros (en el modelo 80.4) están dotados de turbocompresor con intercooler e inyección Common Rail con control electrónico (hasta 2000 bares), para lograr altas prestaciones y un consumo reducido. El régimen máximo es de solo 2.200 rev/min. En el modelo 80, la reserva de par llega al 42 %. El consumo extremadamente bajo, junto a la conformidad con la Fase III B en materia de reducción de emisiones contaminantes, se logra con la recirculación de gases de escape (EGR) externa y refrigerada y un sencillo catalizador DOC, sin necesidad de mantenimiento ni de inyecciones suplementarias periódicas de gasoil.
La amplia oferta, que incluye transmisiones de 4 o 5 marchas junto con 2 o 3 gamas, permite a los Frutteto Natural Fase III B ofrecer desde 8+8 hasta 30+15 relaciones, para encontrar siempre la marcha más adecuada en función de sus necesidades. Para optimizar también los transportes y los traslados por carretera, con todas las versiones de transmisión, es posible alcanzar 40 km/h.
Para garantizar la máxima fluidez de conducción incluso con el motor al ralentí, se incluye siempre una bomba independiente de dirección, mientras que el elevador trasero y los distribuidores hidráulicos traseros (disponibles con 4 o 6 vías) funcionan mediante una bomba de 42 l/min (o 50 l/min como opción) de caudal máximo. El elevador trasero cuenta con una gran capacidad de elevación y una alta precisión. Además de la versión Estándar, para reducir los espacios de maniobra, el elevador trasero está disponible también en versión Compacta.
La distribución del nuevo puesto de conducción es sencilla y racional, para garantizar la máxima facilidad de uso gracias entre otras cosas a la ya conocida “lógica de colores”, que permite distinguir claramente las funciones de los mandos colocados alrededor del puesto de conducción de modo ergonómico y funcional. Gracias al túnel rebajado y a los nuevos mandos, ahora aún más sencillos e intuitivos, el trabajo resulta menos estresante; la práctica pantalla digital situada en el salpicadero proporciona al conductor la tranquilidad de tener todo bajo control.